Septiembre 7 de 2015
Conferencia “La poesía de Alvaro Mútis: en busca del mito perdido”,
con el poeta Rómulo Bustos Aguirre.
6:30pm, Centro Cultural de Cali, con menor asistencia que los eventos
anteriores, aparentemente algunas personas no tuvieron en cuenta que el evento
no se realizaría en la Biblioteca.
Rómulo Bustos, poeta nacido en Santa Catalina de Alejandría, un pueblo
de la Costa Atlántica colombiana. Profesor de la Universidad de Cartagena,
ganador de varios premios de poesía, entre ellos Premio Nacional de Poesía
1993.
Después de la presentación de José Zuleta, el poeta Bustos inició con
la lectura de uno de sus poemas:
POEMA DE AMOR CON SERPIENTES, ERIZOS Y PALOMAS
I
El camino serpeaba
entre yerbajos
Me topé con dos serpientes que formaban un nudo
movedizo
—Hacemos el amor
Me dijeron con sus ojos de serpientes al sentirse
observadas
Yo les arrojé la camisa que llevaba puesta
No para cubrir su desnudez sino para atraparlas
Para atrapar el amor con todas sus escamas
Me topé con dos serpientes que formaban un nudo
movedizo
—Hacemos el amor
Me dijeron con sus ojos de serpientes al sentirse
observadas
Yo les arrojé la camisa que llevaba puesta
No para cubrir su desnudez sino para atraparlas
Para atrapar el amor con todas sus escamas
Las metí en mi bolso
de viaje
Ya tengo dos
serpientes
Ahora solo me falta un paraíso, me dije
Ahora solo me falta un paraíso, me dije
Pero cuando abrí el
bolso solo hallé sus opacas
mudas de piel
mudas de piel
II
El camino estaba
erizado de yerbajos
Me topé con dos erizos, macho y hembra, hasta donde
me fue dado saber
—Hacemos el amor
me dijeron con sus ojos de erizo cuando se sintieron
observados
Y siguieron en éxtasis clavándose sus agujas
Me topé con dos erizos, macho y hembra, hasta donde
me fue dado saber
—Hacemos el amor
me dijeron con sus ojos de erizo cuando se sintieron
observados
Y siguieron en éxtasis clavándose sus agujas
Me atraía
ese amor con todas sus agujas
Pero por precaución decidí no meterlos
en mi bolso de viaje
Pero por precaución decidí no meterlos
en mi bolso de viaje
III
El camino palomeaba
entre yerbajos
Como supondrá el lector me topé
con dos palomas
que me dijeron: hacemos el amor, con sus ojos de
paloma
Las metí en mi bolso de viaje
Como supondrá el lector me topé
con dos palomas
que me dijeron: hacemos el amor, con sus ojos de
paloma
Las metí en mi bolso de viaje
Esa noche cené caldo
de palomas, por si las moscas
En la segunda parte del evento Bustos se desarrolló la conferencia
“Alvaro Mutis, La ritualidad en el vacío y el movimiento incesante. En busca
del mito perdido”, donde Bustos se enfoca como el indica, en el “Primer Mutis”,
en la poesía de Mutis, en la etapa “maqrolliana”, analizado desde el enfoque
religioso.
Inició con una síntesis: “En Maqroll se realiza el arquetipo de la
errancia, en términos de una ritualidad vacía, hueca, esto es, una ritualidad
separada de su mito. En consecuencia, una ritualidad en busca del mito que la
funde, esto explica que el movimiento incesante como sígno del personaje,
Maqroll, eso explica la inestabilidad y falta de sosiego de este antihéroe. La
lúcida conciencia del lento pero inexorable desleimiento de los valores que
trae consigo la modernidad, constituye el elemento nuclear de la cual se
configura la producción creativa e intelectual de este escritor. Su obra y
actitud intelectual se comprende como reacción compleja a este fenómeno, que no
es finalmente otro que el conocido como “eclipse de Dios” o “muerte de Dios”.
Como fenómeno en gran modo fundante de la modernidad y postmodernidad. En este
marco de ideas, el ya sabido conservadurismo de Alvaro Mutis guarda
proximidades con algunas tesis de Nicolás Gómez Dávila, sin que se pueda encasillar exactamente en la
moción de reaccionario auténtico que Gómez Dávila acuña con un artículo a
circular. Entre otras cosas le faltaría para ser un reaccionario auténtico a
Mutis, para no ahondar en el asunto, la adhesión incondicional a lo
trascendente que existe en Gómez Dávila. En Mutis opera más bien en términos
generales una agónica oscilación entre el aquí y el ahora de la inmanencia por
un lado y el llamado de la trascendencia como se verá en el curso de la
exposición”
A partir de esta introducción, la conferencia se desarrolló en torno
al ciclo poético maqróllico, con un elemento clave “el grito del 204”, el verso
final del poema 204, que para Bustos es la clave para leer a Maqroll, el grito
de la inquilina del 204: “Señor, señor, por qué me has abandonado”, palabras
tomadas de Jesús en la cruz según la tradición cristiana, se convierte en la
“piedra angular” con la que Bustos aborda la naturaleza de Maqroll y desarrolla
todo el texto leído en el evento, que es solo un abrebocas para una conferencia
propiamente dicha sobre el tema, que tendría que abordarse en un espacio
diferente y con mayor disponibilidad de tiempo.
Al final, varios poemas de Rómulo Bustos, leídos por él mismo, con su
voz grave, profunda y pausada, un excelente lector:
LA PUPILA INCESANTE
El ojo de la
mosca
nunca equivoca el mejor sitio para posarse
Su revoloteo es baile sobre la mortecina
El gusano es mas filosófico
prefiere trabajar en lo profundo
hasta la disolución final, ese territorio
tan cercano al milagro
donde el miasma vuelve a ser mosca, gusano
pétalo, ángel
o pupila incesante que contempla este juego.
nunca equivoca el mejor sitio para posarse
Su revoloteo es baile sobre la mortecina
El gusano es mas filosófico
prefiere trabajar en lo profundo
hasta la disolución final, ese territorio
tan cercano al milagro
donde el miasma vuelve a ser mosca, gusano
pétalo, ángel
o pupila incesante que contempla este juego.
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